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Claudio Naranjo en nacion.cl

“Claudio Naranjo ha sido ante todo un buscador”, dice la presentadora minutos antes que salga el escenario el destacado siquiatra, discípulo de Fritz Perls, creador de la Gestalt. Cerca de mil personas se preparan para escuchar la ponencia de quien es considerado uno de los maestros contemporáneos en vida. Claudio Naranjo (80) aparece en el escenario -a las 18:50 de este martes- y el silencio se apodera del Teatro de la Universidad de Chile. Nadie quiere perderse las reflexiones de este hombre de pelo cano y sencillo, característica de los grandes hombres que no necesitan jactarse de lo que saben. Su charla versará sobre “la cura de los males del alma y del mundo”, donde dará algunas pinceladas sobre la neurosis y la educación y cómo ésta, a su juicio, no contribuye al logro de la felicidad. Naranjo ha sido profesor de una docena de prestigiosas universidades de todo el mundo y doctor honoris causa por la italiana de Udine. Es autor, entre otros ensayos, de “Carácter y neurosis” y “Cambiar la educación para cambiar el mundo”. LA CEGUERA “Los males del mundo son efecto de los males sicológicos”, parte diciendo el fundador del programa Searchers After Truth (SAT), que se orienta a promover el autoconocimiento y el desarrollo personal, integrando herramientas y disciplinas occidentales y orientales. “Si no juzgáramos con tanta ignorancia no seríamos tan malos. Cuando no se es libre, cuando se tiene que ser bueno nace la rebelión”, continúa el especialista radicado en Estados Unidos. ¿Qué es la ignorancia? “Es falta de sabiduría no de saber”, apunta. Y asevera que “la ignorancia tiene que ver con la ceguera” en no ver las cosas. Naranjo se explaya por los hemisferios cerebrales izquierdo y derecho y se detiene en una interrogante: “¿Para qué educa la educación?. No educa para vivir, para ver, para ser buena persona, para la felicidad”, subraya. SER SABIOS El siquiatra dice que “si fuéramos sabios no nos atreveríamos a usar esa palabra”. En este punto, plantea que le gusta mucho la obra de Saramago en la que habla sobre la ceguera. “La sabiduría no se construye, hay que acallar la parte enferma para que la sabiduría se manifieste”, añade. Luego se detiene en los pecados capitales “que no están en los evangelios” y plantea que algunos prefieren hablar de patologías más que de pecados. “En el fondo los pecados son una forma de avidez”, indica, y manifiesta que “si el problema es la avidez el antídoto” sería un “espíritu de renuncia”. CONCIENCIA DESARROLLADA Y el especialista dispara: “Tenemos el mundo que tenemos por la educación que tenemos”. Reflexiona que se requiere “una generación con la conciencia más desarrollada que la nuestra”. Y el tema de la educación sale al tapete: “No se trata de mejorar los sueldos de los profesores o aumentar el presupuesto” y hace hincapié en “que tenemos una educación sumamente perversa”. Esto porque “no contempla para nada –remarca- el desarrollo humano. Y si esto no ocurre se nos está robando la vida”. Agrega que el hombre primitivo “vivía en un entorno bello y tenía tiempo para estar consigo mismo. Tal vez tenían un acercamiento a lo divino que no apreciamos”. Más adelante en su ponencia-que se prolongó por más de 2 horas- vuelve sobre la educación. “Hoy hay poco espacio para que los niños puedan expresarse. Si quieren diseñar una educación nueva sería bueno tener en cuenta la expresión, la creatividad”. EL AMOR Claudio Naranjo repasa tambié la búsqueda del amor, eje en la vida de las personas. “Una salida (a la falta de amor) es darse cuenta de que la felicidad no está en recibirlo sino que en la capacidad de darlo” y precisa que no sólo se trata de dar amor erótico sino que otras formas de afecto como el gozo, el amor a la verdad. Es importante, recalca, el autoconocimiento para llegar al amor. “El autoconocimiento ni siquiera ha entrado en las escuelas”. El maestro habla también del sufrimiento existencial. “Percibimos un vacío existencial, una carencia de ser. Y como no encontramos la felicidad buscamos sustitutos como el conocimiento, el aplauso”. “Si sufrimos por nuestro vacío, el remedio está en la conciencia del vacío mismo”, detalla. Naranjo se ha pasado del tiempo reglamentado para su charla y cuando termina con sus reflexiones un aplauso cerrado inunda el teatro. Es el reconocimiento para un hombre sabio. CAMBIÓ SU VIDA La vida de Claudio Naranjo cambió bruscamente un día de 1970, cuando murió su único hijo. “La muerte de mi hijo me abrió el corazón. Fue el comienzo de mi nacimiento… decidí que no quería vivir para lo no esencial”, dice el siquiatra en el sitio web de la Fundación Claudio Naranjo, organización sin fines de lucro, con sede en Barcelona, creada para difundir su obra. Discípulo y heredero de Fritz Perls, Naranjo introdujo y divulgó las terapias gestálticas en Chile y Sudamérica. Sistematizó y fijó también los conocimientos aportados por Oscar Ichazo sobre el Eneagrama, actualmente de difusión universal en versiones de diversos autores pero todas ellas emanadas de las primeras enseñanzas de Naranjo.